Live in the city of light (1987) de SIMPLE MINDS

     Ciertamente en el preciso momento en que salió al mercado este pedazo de disco de los escoceses Simple Minds, que grabaron en directo entre el 12 y el 13 de agosto de 1986 en el estadio parisino de Le Zenith y que lleva por título 'Live in the city of light' (1987) un servidor no era todavía fan de la banda de Jim Kerr, el líder y cantante principal de los Simple Minds. Sí recuerdo un verano en el pueblo, supongo que sería hacia 1988  estando junto a mi pandilla de amigos, oír mencionar este fabuloso disco.

    Como siempre, mi amigo Toni era quien más estaba puesto en bandas de pop-rock extranjeras, y de su boca escuché el nombre de este espectacular álbum en directo. Todavía tuvo que pasar un montón de tiempo para poder hacerme con el disco en cuestión. Aunque lo del 'tiempo' suele ser cuestión de perspectiva. Hace muchos años (en los 80 sobre todo) el paso del tiempo para los que estábamos en plena juventud (me refiero, claro, a tener entre 13 y 23 años), como ya he comentado en otro post, era mucho más lento de lo que es ahora...en fin...

    Verdaderamente este 'Live in the city of light' (1987) de los Simple Minds es un claro ejemplo de profesionalidad técnica a la hora de plasmar una más que excelente actuación musical en directo de un grupo musical. La calidad sonora es patente en dicha grabación. El trabajo realizado es magnífico, por eso este disco suena francamente bien. Es todo un lujo escucharlo en un buen equipo de Hi-Fi, no debéis dejar pasar la oportunidad de disfrutar de las preciosas canciones de Simple Minds.

    Es sin lugar a dudas el mejor directo de la banda escocesa más famosa del pop-rock de los años 80 y por ese motivo hoy toca comentar varias de las canciones que incluye este grandioso y poderoso álbum en directo. Decir también que el tema 'Someone, somewhere in summertime' fue grabado durante el concierto celebrado en octubre de 1986 en Sydney (Australia)

    La palabra que para mí define este maravilloso conjunto de canciones es, "sensacional"  Entre todas ellas, las que más me gustan y emocionan (y procuraré para variar ser lo más breve posible, más que nada para no alargar excesivamente este post) son las siguientes:

    'Once upon a time'  Preciosos los riffs de guitarra. El piano y los sintetizadores, como siempre geniales. Un tema que rebosa alegría. Me encanta sobre todo la parte casi instrumental, a mitad de canción, donde el ritmo realiza un ligero cambio, como queriendo ralentizarse, pero logrando una musicalidad preciosa.

    'Someone, somewhere in summertime' tiene esa melodía casi perfecta que tanto me gusta a mí. Comenzando con esos magníficos riffs de guitarra, apoyados por unas leves notas de violín (que quedan fantásticas, la verdad) estilo celta. A continuación surge la línea del bajo y el piano. La estructura  musical se va repitiendo, y las emociones inundan mi ser. El final es también digno; pues la cadencia del ritmo va a menos hasta dejar un exquisito sabor de boca. Para mí, uno de los temas más bonitos de Simple Minds.

    'Ghostdancing' es el enérgico tema con que arranca este maravilloso disco. Una canción repleta de energía. Un ritmo sensacional, arropado por unos instrumentos que suenan a gloria bendita. La línea del bajo (con su slap bass) me encanta. Justo en la mitad de la canción, el slap bass, se marca un solo realmente asombroso. Ya casi al final, los riffs de guitarra eléctrica rematan sorprendentemente esta preciosa canción. Un tema soberbio como presentación de este disco.

    'Promised you a miracle'  Simple Minds en estado puro; que queréis que diga...Siempre me gustó mucho esta canción. Ya desde que la escuché como single allá por 1985  Y ahora en directo, suena hasta mejor. Esos riffs de sintetizador ¡es que son la pera...! Me atrevería a decir que son parte muy querida y representativa del mejor pop de los ochenta. Además está ese estribillo tan pegadizo; apoyado también por esos sonidos de guitarra (alucinante el solo de guitarra que se marca Charlie Burchill poco antes del final) y el constante riff de sintetizador; homérico por cierto...Buffffff... Son muchos los recuerdos asociados a esta maravillosa canción. Recuerdos bien bonitos, y con cierto aire nostálgico, la verdad. 

    'Alive and kicking' es, creo, la primera canción que escuché de los Simple Minds, como ya creo haber comentado en un anterior post. Me fascinó el video-clip, y lo disfruté durante mucho tiempo. Viéndolo varias veces y escuchando la maravillosa canción. Esa línea del bajo me deja estupefacto de lo portentosa que es. Aunque el conjunto general de todos los instrumentos es una delicia. Esos acordes iniciales del sintetizador...me encantan...Los coros de Robin Clark...¡vaya calidad artística! El piano...qué decir... Bueno, es que todo es admirable. Una de las mejores canciones de la banda escocesa, sin duda. Forma, además, parte indiscutible de mi legado de esas canciones que me han dejado una profunda huella sentimental. A disfrutarla una y otra vez. ¡La de veces que la habré escuchado ya...!

    'Don't you forget about me' es otro de esos grandes clásicos de Simple Minds. Todo un referente. Una canción estandarte digamos. Absolutamente encantadora. Tiene una estructura musical casi perfecta. Aúna melodía e instrumentación de alta calidad. Toda la parte del piano está magníficamente desarrollada. Me trae recuerdos bastante emotivos; y no solo por ser el tema abanderado de la banda sonora de esa famosa película norteamericana, titulada 'El club de los cinco'  Todo un himno y un lujo de  canción. Sin duda, una típica canción ochentera.

   Y ya para finalizar este 'pequeño' repaso a las canciones que más me gustan de este doble álbum en directo de la banda escocesa, añadiré el encantador tema 'East at easter' el cual, a diferencia de la versión original de 1984 del álbum 'Sparkle in the rain' (1984) aquí se convierte en la principal balada de todo el concierto. Una canción llena de sentimiento. Donde para mí, la melodía es la protagonista. Una canción netamente maravillosa y emocionante a partes iguales.

    Al final acabé alargando un poco más de lo previsto este post. Pero es que me cuesta tanto a veces no expresar ciertos pensamientos, que ocurren estas cosas... Ahora solo toca ponerse cómodo y disfrutar tranquilamente (dentro de la medida de cada uno, claro está) de este maravilloso disco en directo de Simple Minds.